miércoles, 7 de octubre de 2009

El peso sobre los hombros


Presumo de que el marrón es mi color favorito pero luego resulta que el rojo es el que mejor hace efecto en los labios. De modo que también decidí darle color a mi hombro, aunque entre en conflicto si voy de rosa. Ya sabemos todos que soy algo maníatica (aunque no me guste esa palabra) para los colores y sus combinaciones. Sin embargo fue una decisión rápida y repentina, en la que cerré los ojos y me dejé llevar. Recuerdo vagamente la última vez que lo hice. Pero sé que me salió bien. Y lo primero que uno tiene que hacer en la vida, es estar seguro de que sus decisiones son las mejores que podría haber tomado.

Estoy contenta de la vida que tengo ahora, creo que es un año bien aprovechado, a pesar de que mi carrera se alargue. En tiempos de crisis, becarios. Alabados seamos, digo yo.

Y sobre mis hombros, las responsabilidades y ahora más que nunca la música, a modo de gramófono, oldschool, como era de esperar en mí.

1 comentario:

ange dijo...

es cierto que si no vas completamente conjuntada no eres tu, pero a mi me gusta mas descolocar cosas y juntar colores...

te kiero fea