martes, 25 de noviembre de 2014

Otro Día Internacional, el de la Violencia Contra la Mujer

Hoy es el Día de la Violencia contra la mujer. Todo empieza en la psicología, en lo denigrante de que alguien no sea capaz de decir por qué está contigo si te trata mal.
La respuesta puede ser que lo que le gusta, es precisamente eso.


Todo empezó cuando conoció a mis amigas.
Dijo que no tenían nada que ver conmigo.
Eso me alejó de ellas.

Pero yo tampoco resulté ser válida.
No hacía bien mi trabajo.
Eso me decía el. Y eso que no me veía trabajar, que es lo más curioso.

Cada día era un examen por no fallar.
Un día le pregunté qué le gustaba de mi.
Se hizo el silencio.

Lo que le gustaba era torturarme.

La siguiente cosa que recuerdo fue preguntarme donde estaba.
Con quién.
Por qué tardaba tanto.
Cuándo vas a volver.
No me hagas esperar.
No vayas al ensayo.

Después vinieron las preguntas.
¿Por qué comes esa mierda?
¿Por qué cantas en ese grupo?

Un poco más tarde llegaron las afirmaciones.
No tienes ni idea.
No pongas esa cara como si te estuviera diciendo algo.
No montes una escena.
No compres eso.

Se me ocurrió tomar algunas decisiones, como la de no invitarle a un cumpleaños donde iban a estar todas esas personas que él rechazaba llamada mis amigos.

Ahí llegaron los gritos, los golpes al sofá, me acorraló en un armario y su puño me pasó por la sien, haciendo un agujero en la puerta.

Después de mucho caos en la cabeza, de haber perdido completamente mi autoestima, de haberme secado de tanto llorar, y de no saber por qué me pasaba todo esto, llegué a una conclusión.


No quiero esto en mi vida. Y en esa moraleja, empecé a recuperar lo que ese tío me quitó.

jueves, 13 de noviembre de 2014

El Mundo se ha vuelto loco

El Mundo se ha vuelto loco, porque dicen que el sufrimiento es necesario. ¿Eso lo dijo El Mundo, o sus habitantes?

jueves, 2 de octubre de 2014

Corrupción y poca cosa más

Siento mi ausencia. 

He estado algún tiempo de retiro espiritual. Es totalmente necesario ultimamente en este país donde nos roban todo el tiempo. Si los políticos corruptos fueran comida, no pasaba nadie hambre. Aunque si no fueran corruptos seguro que podíamos comer muchos con el dinero que han escondido:

Bárcenas, Blesa, Roca, Julián Muñoz, María Antònia Munar, Urdangarín, Del Nido, Díaz Ferrán, la familia Puyol, el padre de Messi, los señores de las tarjetas B en Caja Madrid, (ahora Bankia), la rescatada por todos nosotros...

Vayanse mucho a la mierda. 

Tengo 28 años y estoy decepcionada con que hayan madurado así, para robar a los que no tienen gran cosa. Esos trajes, esos Audis, Mercedes y BMVs, y esas comilonas que les hace crecer la panza, no son cosas que se pagan con su esfuerzo. Han dejado de hacer el esfuerzo hace tiempo.

Hace una semana me senté en la Administración de Hacienda para darme de Alta en Actividades Económicas, para ser una empresaria improvisada, para empezar a pagarme yo la Seguridad Social y así engrosar esos "buenos datos de afiliación. Una afiliación falsa y egoísta me van a perdonar. 

Allí una chica esperaba como yo. Me decía que Hacienda le investigaba por algunas cuentas que no le cuadraban, ella decía que fue un fallo de suma, porque "con los excel me hago lío, y ahora estoy en el punto de mira los próximos 5 años". 

Hacienda, como su nombre indica, Haciendo el ridículo persiguiendo a la gente equivocada. Diciendo que la infanta Cristina no sabía lo que firmaba, pero los abuelitos de las preferentes si.

Vayánse a la mierda una vez más.

Nuestra generación ya se la han cargado, porque el trabajo se ha hecho precario, salir de casa es cada vez más difícil y la dignidad y la madurez al final son cosas que te cuentan pero poca experiencia puedes tener con ellas. 

Estoy indignada. Porque en mi casa siempre se me ha inculcado que las cosas hay que ganárselas. Que lo bueno llega con el esfuerzo. 

Lo que algunos deben entender en su casa, es que lo bueno llega con el esfuerzo de otros.

Pues vayanse, por tercera (que es la vencida) vez, a la mierda.

viernes, 13 de junio de 2014

No era tan idiota

Ya sabeis lo que me gustan los audio relatos, o las audioflipadas, llamadlo como queráis. Son cosas que escribo y es una pena que se queden en papel. Porque hay cosas que ganan un poquito de sentido con música, voz y entonación.

En este caso es una reflexión sobre los distintos ritmos de las mujeres y los hombres, y de como tenemos prisa por encajar cuando a lo mejor es imposible. Lo importante es no echarle la culpa a nadie.


martes, 10 de junio de 2014

Lo ilegal de compartir coche

Fomento avisa de que si usamos servicios como Uber o Bla BlaCar, podemos ser multados. Las sanciones van desde los 600 euros hasta los 18.000 euros. Todo esto después de que desde hace tiempo, varias compañías de autobús y el gremio del taxi, presentaran sus quejas y anunciaran una huelga para mañana.

La Unión Europea, de la que tantas veces España parece estar fuera en cada no ejemplo que da, o en las comparaciones que no interesan, se mantiene tolerante con estos servicios a pesar de que también hay gritos en contra.
 
España da sus motivos para no apoyar el transporte compartido: 

    El transporte de viajeros por cuenta ajena en un turismo particular, a cambio de una retribución económica como es el caso, va en contra de la Ley de Ordenación de los Transportes Terrestres. Una de esas leyes que no sabes que existen hasta que surgen estas cosas.

   Los taxistas añaden que los conductores no pagan los correspondientes impuestos de la actividad económica.

   Falta de seguridad. Como viene siendo habitual en el transporte rodado, en estos servicios no se controla la calidad ni las medidas de seguridad para el usuario, tales como descanso del conductor o límite de velocidad.

    No existe el seguro en caso de accidente, o eso dice la Federación del Taxi, ya que aún no se sabe si los seguros responderían ante un accidente cuyos implicados ni se conocen…

La guerra está servida porque lo ilegal siempre surge de una necesidad. Los usuarios creen que los precios de taxi y autobús se disparan y por eso necesitan alternativas que les reduzcan los costes. Las empresas de bus y taxi no reducen sus costes quizá por cubrir los gastos de impuestos que ellos sí pagan. Y así se crea una pescadilla que se muerde la cola.

La solución… vendo boli Bic, y te llevo a Benálmádena por 20 euros. Por el camino podemos contarnos la vida, para que cuando nos pillen parezca que nos conocemos. Porque entre amigos, irnos juntos de vacaciones no es ilegal.

Todavía.

miércoles, 4 de junio de 2014

Jason Barnes, un baterista con brazo biónico

Una historia de superación que conté en La Noche de COPE. Es Jason Barnes, un joven baterista que perdió un brazo en un accidente pero gracias a un prototipo de brazo biónico, consigue seguir tocando.

lunes, 19 de mayo de 2014

Nada

Se asomaba la luz por la puerta entreabierta y además te levantaste para poner música.
Ahí es cuando me lo creí todo. Las sábanas eran suaves, la música era triste pero decía que me ibas a cuidar toda la vida. Me hacías café y me abrazabas cuando me asomaba al balcón para dar al sol los buenos días.

Pero ya ves. Las canciones no eran lo mismo para ti que para mi. A mi la música me salvaba, a ti te atrapaba en la nube negra de tu espalda.

Lo que nos pasó fue que yo era la alegría que necesitabas y tu la oscuridad de la que aprendería. Aprender a que caminar juntos es dar pasos levantando el pie, sin arrastrarlo. A que había que comprar azúcar porque a mi el café no me gustaba tan amargo como a ti. A que las palabras tendrían sus consecuencias si no eran verdad, y tendrían otras peores si además eran mentiras.

Caminar juntos era encontrar el equilibrio, porque yo era baja y tú alto. Cuando ibas en bicicleta, era llevarla en la mano, hasta que yo volvía a irme por unas horas. Pero en esas horas seguías estando, tus demonios me escribían justo ese día que yo por fin tuve un smartphone. Me presionaron a entender la tecnología de la peor manera.
Para quitarle hierro al asunto, intenté pedirte que volvieras a tocar. La música era el único rato que veía lo bueno de ti… y dijiste que no.

Volviste a levantarte una mañana, a preparar café, a encender el equipo, y pusiste esa canción que hacía tiempo era mi tono de llamada. Pero ese día no me asomé al balcón, hacía frío, y esa nube negra que tenías en la espalda, ahora estaba encima de mí.

Yo solo esperaba que luego saliera el arcoiris.


NOTA: Este texto surge de la inspiración que me dio David García con este tema titulado "Nada"

viernes, 16 de mayo de 2014

40 años

Un homenaje a los jugadores del 74
"¿Para qué?" - Les dijo Luis Aragonés a la Peña de los 50- "Si ya somos mayores y encima ni ganamos".
Muchas razones le dio Petón pero yo me quedo siempre con esta: "porque el Atleti es ir de la mano con tu padre." El camino no era muy largo, él se crió en el paseo de los Melancólicos 22. 
Allí empezó todo, y tal como dicen en el anuncio de Mahou "hay cosas que son para toda la vida". El Atleti claro, como no. Y pese a las dudas de Luis, allí estaban todos los que pudieron. 40 años después: Ayala, Panadero, Eusebio, Irureta, Garate, Reina, Ovejero, Adelardo, Pacheco, Melo, Benegas, Ufarte, Rodri... 
Recordando un atleti que no ganó. 
Y que más da. 
Hemos aprendido a sufrir. 
Pero nunca aprendemos a olvidar. 
Por eso y llegados a este punto 40 años después, era necesario recordar, compartir y charlar con todos ellos. Ven a un Atleti luchador, y robándole el chiste a Ovejero: "no está Cholo sino bien acompañado". No importan los tropiezos sí Panadero mete la pierna sin querer, o si nos da un calambre como a Gárate, no importa si a Eusebio le dan abrazos los taxistas de la emoción y tenemos que esperarle un momento. El Atleti es especial y deja una marca que deja historia.
La mía, es una historia que no es aún recuerdo con mi padre de la mano, andando hacia una final, reunidos en El Parador, o en la puerta 28. Han pasado 40 años de una final que repetimos y aquí estamos, soñando fuerte. 
He sentido lo que me contaba mi padre del 74. 
"Este año redondeamos", lo han dicho ellos.
Y como dice Sabina: "Con mi papa de la mano"

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lunes, 28 de abril de 2014

Ángela

Ángela.
El primer día que la vi, iba de amarillo, el color de la alegría.

Aunque la alegría de la huerta, todo hay que decirlo, no estaba personificada ese día, que me dio dos besos orejeros, como dice ella, y se presentó con tono agrio (si Angela, sí, no pongas esa cara que estás poniendo porque ya te he perdonado).

Pero ese primer encuentro es el que tuvimos y ese malestar por estar en el turno de tarde de la universidad nos unió para siempre.
¿Quién me iba a decir a mi, que bailaría con ella hasta altas horas, que nos sentaríamos en la orilla de distintas costas, que seríamos modelos la una para la otra? ¿Quién iba a decir que los capones que le diese yo un día me los devolvería ella al siguiente? Es así. Y así será siempre. Lo único que ha dejado de hacer es pintarme las mangas con tinta de boli porque ya no compartimos pupitre, y cuando la tengo cerca ya no lleva el boli cerca (gracias smartphones por permitir las notas). 

El caso es que es el claro ejemplo de que “las apariencias engañan”. No es muy grande. Es pequeña. No habla alto. Habla claro. No le sale todo bien. Se deja la piel. Está morena todo el año. Su amistad es para toda la vida. ¿Cómo no iba a comprometerme?

jueves, 24 de abril de 2014

martes, 11 de marzo de 2014

El jueves 11 de marzo de 2004



Recuerdo que era jueves, fui a clase porque teníamos un examen de recuperación de historia, me lo ha recordado mi amiga Maria Anna, porque de ese día solo recordaba buscar desesperadamente una radio y escuchar qué estaba pasando, y por qué no llegaban a tiempo algunos compañeros a clase. Días después, yo tenía 17 años, cuando escribí esto.


“A partir de un jueves, nadie habla en los vagones. Solo hay un silencio que no para de gritar ahogado por la impotencia que siente, la rabia que le ha inundado, la desesperación en que ahora está sumergido.

La gente no puede llorar porque tiene miedo, las lágrimas empañan su visión, y ahora no hacen más que mirar a todo individuo con mochila en el tren. No hay tiempo para llorar mientras corres peligro.

Ya nadie tiene nada que contar porque lo único de lo que se habla estos días, es ahora tabú en la RENFE.

Nadie se atreve a seguir con su vida, porque mucha gente ahora tiene una totalmente distinta y algunos incluso sin estar en el tren, se la han arrebatado.

No saben describir lo que pasó ni cómo pasó. Solo saben que se acuestan y viven un atentado continuo, recuerdan personas, recuerdan un escenario ensangrentado por la incomprensión. Recuerdan el dolor perplejo que sienten e ignoran todavía un por qué.

No hay porqués al igual que no hay suficiente castigo en el mundo para quienes con su deshumanización provocaron esto. La gente no puede centrar su odio en ellos porque solo sienten el pasado amor que tenían por quienes ya no están entre ellos.

El silencio es vigilante, es desconfiado, es miedica, y es provocado.
El silencio ha hablado en lar urnas pero muchos no saben lo que decía.”


miércoles, 5 de marzo de 2014

Renglones de palabras

He leído recientemente un libro que mucha gente me ha dicho que es decepcionante. A mí no me lo ha parecido. Sobre todo porque he sacado algunas cosas importantes de él. Al fin y al cabo, si la historia no nos gusta, siempre hay alguna frase de escritor motivado de la que apropiarse y sobre la que reflexionar. Estos son algunos ejemplos sobre "El Caso de Harry Quebert".


Eso. Violencia. Pero es cierto, en sentido figurado, a veces hace falta un golpe de efecto. Las palabras deberían ser suficientes, pero como existe gente que ni las usa, ni les da la importancia que tienen, pues habrá que tener en cuenta la expresión no verbal.


Quien da el golpe se arriesga a que se lo devuelvan, pero podría salir victorioso. El caso es que si en esta vida no nos movemos, no somos más importantes que Mahoma, de modo que ninguna montaña va a venir a hacernos el favor. Quien arriesga gana. Haz la prueba.


Claro, todos usamos las mismas palabras, pero depende de a quién se las digas, cómo las digas, y el momento, su significado podría engordar. Un te quiero lo dice todo el mundo. Quizá puedas darle un sentido particular, que no sea el que usa el  mundo actualmente.


La enfermedad, el desamor, la tontería, o las malas pasadas, pueden ser temporales, solo hay que saberlo, y dejarse llevar por la música. Porque el libro ya lo he terminado.

jueves, 13 de febrero de 2014

Es el día de dar gracias



Todo el mundo dice que lo de ser periodista era vocación. Tengo que recurrir a todo el mundo porque tengo algunas lagunas de cuando era muy pequeña. No sé ni a qué edad empecé a recortar cosas que me interesaban de los periódicos y las revistas, y las reeditaba, como si fuese redactora jefe de revistas que yo misma daba forma, y se las regalaba a mi hermano, para que otro las leyera.

Cuando me regalaron un radiocassete de doble pletina, fue el primer mejor regalo de mi vida. Grababa las canciones y las soltaba literalmente tras hacer una presentación, digna de una radio comercial, me gustaba contar historias, noticias que leía, dar los buenos días, las buenas tardes, entrevistar a mi hermano haciéndose pasar por un importante jugador de fútbol, me gustaba hacer mi propio editorial del día. Me gustaba la radio. Ni siquiera la escuchaba antes, la hacía… y luego llegó la grabadora.

Segundo mejor regalo de mi vida. Una grabadora de las de antes. Me iba al colegio y grababa a mis compañeros, que opinaban sobre algún tema importante, y montaba mis propias encuestas. Caminaba por la plaza Felipe II y paraba a los transeúntes para que me contaran historias.

Además de presentadora, también hacía de reportera. Entonces alguien dijo que la niña quería ser periodista. Ah, que esa era la palabra para hacer todo esto que estaba haciendo. Pues sí, mamá. Sin duda quiero ser periodista.

Mi padre quiso hacer unos planos de paisajes de Ibiza para hacer un vídeo musical sobre la naturaleza de la isla. No se lo puse fácil, porque enseguida me subía a una piedra y con voz de presentadora repelente le decía que “a la derecha tenemos estos maravillosos acantilados donde las olas rugen con fuerza…”

“Babu, quítate de la cámara que eres muy pesada…”

Mi pesadez, y mi familia, la que me ha pagado los estudios que me han llevado a ser lo que quise ser, son los que me han puesto donde estoy. Hoy es el Día de la Radio. Hoy es el Día de dar las gracias a todos los que me dejan estar aquí.

lunes, 10 de febrero de 2014

No nos gustan las sonrisas

A LOS ESPAÑOLES NO NOS GUSTAN LAS SONRISAS

En general, y en particular. Me refiero a que cuando la cosa va bien,
da poco de qué hablar. Y claro, no vas a llegar un lunes al trabajo sin nada de lo que hablar. Porque a la hora del tupper uno quiere hacer algo más que remover los guisantes con jamón, que por cierto te salieron sosos.

Uno quiere comentar la jugada. Quiere sentirse tertuliano. Que a este paso de tanto repetirlo va a parecer que es una profesión.

Este fin de semana ocurren dos cosas. Las dos, políticas. El no paseíllo de la Infanta Cristina y el correspondiente lío que se ha montado con el vídeo grabado de su declaración del cual el juez tiene sus sospechas… Parece sacado de una novela de Vázquez Montalbán.

Después está el tema de los Goya, y de los reclamos de cuidar la cultura. Que obviamente hay que hacer campaña sea como sea. Y entonces, un domingo, tenemos otro mitin político, que para un país donde la gente vota sin leer el programa del partido, pues está bastante bien.

Aunque por otro lado, para qué leerlo si luego no se cumple.

En general a los españoles no nos gusta la sonrisa. Porque cuando la infanta denota sobriedad con un traje negro y una camisa blanca, da los buenos días, pero los da sonriendo, pues no nos vale. Supongo que esperaban verla hundida y pensando, ¡ay en qué líos me mete mi maridín! Si es que va a ser verdad eso de que a las mujeres nos gustan los malotes…

Tampoco nos gusta disfrutar de la cultura sin alguna pullita de Maribel Verdú u otras actrices que llevan a sus hijos a los hospitales públicos pero viven lejos en esas fincas tan chulas que se ven desde la A6…

Pero el ministro Wert esta vez no estaba para animar el cotarro con su “pon cara de estar aprobando un tratado de paz internacional”. Y nos sentimos decepcionados por no podernos haber enfadado con su presencia y no haber disfrutado de los premios del cine de una manera mucho más profunda.

Luego tengo que escuchar que los periodistas es que solo sabemos dar malas noticias.

Oye pero si es que luego en la comida no tienes nada que contarme. Y claro, yo sí quiero reírme un poco.

lunes, 3 de febrero de 2014

Buenos días

Buenos días, Bárbara.

Hoy va a estar mayormente nublado, aunque se que te gustan esos días, que sepas que va a hacer un frío que pela, es más, está empezando a nevar. Pero tu ponte ese vestido que tienes en la silla, te queda bien, y para estar guapa ya sabes que hay que sufrir. La máxima va a ser de 7 grados, pero piensa que el número es un número relacionado con el amor. La mínima será de uno y cuando se acerque la noche estará despejado. Tienes una alarma a las 21:30, pero ya sabes que para el resto de tu vida, cualquier momento es el adecuado para hacer las cosas que tienes planificadas. Te quedan 20 páginas para terminar el último libro que estás leyendo, Hacia Rutas Salvajes. Se que después de ese te va a dar por leer libros relacionados con desafíos humanos, y que alguna vez te has identificado con el protagonista, en su empeño por asomarse a una roca y ver un paisaje y mucho más, pero no te recomiendo que si lo decides hacer, lo hagas con ese vestido. Así que si decides ponértelo, recuerda no hacer ninguna locura. Ese chico que ronda en tu cabeza la podría hacer por ti. Solo tienes que quitarte el abrigo. 

Te saluda con afecto, tu móvil. Que tengas un buen día.

jueves, 30 de enero de 2014

Sírvame una mirada

Estaba literalmente en la otra punta de la barra. Aunque se hacía hueco su mirada, había demasiadas cosas delante: Una caja con limones, copas, un grifo de cerveza, servilletas. La excusa fue la televisión, que le permitió obligarse a desplazar la banqueta hasta justo detrás de ella. Casi podía olerla, y ella casi podía tener escalofríos al sentir su respiración acercarse a su piel. No hablaban. Pero miraban. Vigilaban su presencia.

La mujer de él consultaba el teléfono, apoyada en la barra, sin percatarse de que su marido parecía interesarse por otra

La lucha de miradas duró toda la noche, hasta que ella se fue.
Se puede decir que tuvo suerte.
Suerte de irse antes de que intentaran a fin de cuentas, hacerla daño.

viernes, 24 de enero de 2014

Vacaciones de riesgo

Gente que monta una empresa nada más salir de la universidad, que no ha tenido tiempo de viajar, que le va muy bien en sus negocios y tiene dinero, gente que quiere vivir una aventura, con riesgos, y que está dispuesto a lidiar con ellos. Ese es el perfil de gente que contrataría un viaje a zonas de alto riesgo en el mundo, con la ayuda y la protección de The War Zone Tours.

Dice uno de sus fundadores, Rick Sweeney, que esta empresa es un hobbie, que nació de sus múltiples viajes a zonas de guerra como militar en EEUU. Lleva 20 años en operaciones de alto riesgo, protegiendo a los efectivos. Ha vivido la guerra y también el otro lado que a los medios de comunicación casi no llega, la historia de la gente que vive, las calles y la buena gente que hay en estos países. Rick ha hecho grandes amigos, y esta agencia, es su forma de presentarle eso que él descubrió una vez. Promete protección. Un operativo de 5 a 10 personas velan por la seguridad de sus clientes de forma invisible. No puede viajar un grupo mayor de 4 personas, porque la protección no sería eficaz.

No es para morbosos. Es un viaje serio, con riesgos, con un dispositivo pensado semanas antes sobre el terreno. Lo más barato es viajar a Méjico porque es frontera con EEUU, hablamos de unos 2000 dólares diarios. Lo más caro, las zonas más calientes ahora mismo: Irak, Afganistán y Somalia. Unos 4000 dólares tienen que pagar los aventureros para conocer el trasfondo de estos países. Siria de momento está en standby, la poca claridad en la procedencia de los diferentes grupos rebeldes, ha hecho que Rick no tenga claro un tour. Pero dice que no es por la seguridad, sino por el mal que puede hacerle a las relaciones del gobierno de EEUU con el régimen sirio.

Sorprende los motivos. Pero más aún sorprende que después de trabajar en la seguridad militar de su país, Rick, como hobbie, también participe en la seguridad de un civil, que como tú o como yo, alguna vez pensará en poder viajar a esos países. 

Sweeney dice que más allá de enseñar la guerra, el objetivo es enseñarte lo que no estas viendo detrás de la cámara. Asegura que muchas son cosas buenas.

Aquí tenéis mi entrevista completa a Rick Sweeney (en inglés sin traducción)